El presidente de AFARTE Federico Hellemeyer abrió la posibilidad de una ruptura del acuerdo firmado en noviembre pasado con la UOM, por el cual el sector empresario se comprometió a mantener la dotación de personal efectivo a cambio del congelamiento salarial por dos años, pero además el acuerdo de competitividad apuntaba a bajar los precios y compensar con volumen de ventas la pérdida de rentabilidad. Estas condiciones no se están dado, sino todo lo contrario: Hellemeyer habló de una caída de la actividad que supera el 50% y no ve señales de reactivación del consumo en el continente.
La crisis se profundiza y desde el sector empresario anticipan que el acuerdo firmado en noviembre pasado para sostener la planta de personal efectivo, no se podrá cumplir en estas condiciones. Por ahora sobreviven algunas empresas con suspensiones y se prevé adelantar las vacaciones, pero el ajuste está imponiendo despidos de los trabajadores que tenían garantizado su puesto por dos años.