El Ministerio de Energía convocará a audiencia pública a realizarse en la semana del 13 al 17 de noviembre para discutir un aumento en el precio del gas. Los nuevos valores regirán desde el 1 de diciembre y en la misma fecha se aplicará la segunda fase de la suba para las transportistas y distribuidoras del producto así como el ajuste por precios mayoristas por el período abril-noviembre con lo que se llegará a un incremento superior al 40%.
De esta forma, los aumentos del último trimestre quedan escalonados: en la semana del 23 de octubre se concretaría el alza en los precios de los combustibles al público y a partir del 1 de noviembre se daría vía libre a los incrementos ya previstos para Edenor y Edesur, no habiéndose determinado todavía si habrá también una variación en el precio mayorista de la energía que alcanza a todo el país. Finalmente, en diciembre vendrán los aumentos en las tarifas de gas.
Este escalonamiento se debe en parte a las elecciones del 22 de octubre por las cuales las petroleras postergaron hasta ahora el incremento en las naftas que estaba pautado para el 1 de octubre. Por la misma razón, el Gobierno pospuso la fecha para pasar al próximo escalón en el precio del gas que también debía hacerse en octubre. En cambio, los ajustes en los márgenes que reciben transportistas y distribuidoras de electricidad y gas ya están pautados, e incluso está determinado también que en febrero y abril de 2018 respectivamente habrá nuevos aumentos para mejorar los márgenes de esas prestadoras.
Según el cronograma original, el precio del gas, que tiene una incidencia del 60% en la factura sin impuestos, pasará desde u$s3,77 fijados en abril pasado, a u$s4,19, lo que significa un alza del 11,1% en dólares. Además, el Ministerio de Energía deberá estimar el valor del dólar para el período diciembre-marzo, para que se determine el precio en pesos a trasladar a las tarifas de los usuarios.
En tanto, para los márgenes de transporte y distribución, que representan el otro 40% de la factura sin impuestos, se aplicará la segunda fase del incremento. La primera fue en abril y significó el 30% del total autorizado, lo que se tradujo en un aumento del 20% en las tarifas residenciales. La segunda, en diciembre, equivaldrá al 40% sobre lo pautado y tendrá una incidencia de alrededor del 25% para el público.
De esta forma, el aumento en las tarifas de gas que regirá desde diciembre sería del 39% sobre la factura antes de impuestos, y rondará el 44% si se considera que también debe aplicarse un ajuste por la evolución de precios mayoristas (IPIM, nivel general) entre abril y noviembre sobre los márgenes de transportistas y distribuidoras. (ambito.com)